Leí un artículo de una filósofa y bailarina,Marie Bardet,que llevaba este título...
EL BAILE DE LA MENTE.
Me lleva a pensar en nuestro movimiento,en nuestra clase,que invita a eso,a unir en nuestra danza,a un cuerpo moviente con la fuerza de los conceptos que nos habitan.
Encontrar en la ligereza de nuestros pies,la fuerza para mover los puntos fijos,esos que nos traban,esos que no nos permiten "movernos" de los puntos crónicos de repetición.
Encontrar en el baile un simple gesto que acerca lo mas pesado a lo mas liviano.
Alivianar,aliviar,despejar con el aire los lugares más anclados,mas antiguos.
"Entrar en movimiento es aflojar algo,arriesgarse a la caída,una apertura riesgosa que nos quita la rigidez"
"Nietzche reconocía que los oídos del bailarín se situaban en sus talones.El caminar en danza es una escucha al mismo tiempo que un gesto,del suelo y de la tierra.Caminar para escuchar los relieves,los conflictos y las direcciones que se actualizan".
